Balance social del ciclo de COVID-19 en América Latina y el Caribe (PARTE 1 Y 2)

El Observatorio Socioantropológico Pastoral del Centro de Gestión del conocimiento del Consejo Episcopal Latinoamericano (Celam) presenta la sección Investigaciones Celam, que estará disponible para todo público en la página web.

Desde abril y todos los meses, Investigaciones Celam presentará un informe o estudio sobre la realidad social y eclesial de América Latina y el Caribe, de la mano de especialistas, investigadores, docentes, teólogos, vinculados con el Observatorio, que coordina el laico argentino Agustín Salvia, investigador y docente.

Balance social del covid-19

En esta primera y segunda entrega se podrá acceder al Balance social del ciclo COVID-19 en América Latina y el Caribe (2020-2021): Diagnóstico de situación socioeconómica y Ambiental, el cual podrá descargar en cuatro idiomas: Español. Portugués, inglés y francés.

Este estudio se ha desarrollado en conjunto con la Red de Observatorios de la Deuda Social de América Latina y el Caribe (Red ODSAL) y la Organización de Universidades Católicas de América Latina y el Caribe (ODUCAL).

Sobre esta investigación, Monseñor Jorge Eduardo Lozano, secretario general del CELAM y arzobispo de Cuyo (Argentina), ha reseñado que “en este documento encontraremos datos respecto de la magnitud de la crisis, pero al mismo tiempo la forma en que han reaccionado los Estados, evitando que el desastre fuera tres veces peor”.

De igual manera, advierte que “el financiamiento de la ayuda a la población está aumentando el endeudamiento de nuestros pueblos. Es una señal de alerta, pues en el fondo esto significa que el costo de la pandemia será financiado con mayor pobreza”.

Estructuración del informe

El informe se ha estructurado a partir de los sueños del papa Francisco en la exhortación Querida Amazonía; cierra con una reflexión teológico-pastoral para poner en perspectiva la necesidad de soñar juntos, tal como lo propuso el Sumo Pontífice a los movimientos sociales en 2021.

«Necesitamos utilizar esa facultad tan excelsa del ser humano que es la imaginación, ese lugar donde la inteligencia, la intuición, la experiencia, la memoria histórica se encuentran para crear, componer, aventurar y arriesgar”, apuntó Monseñor Lozano.