Oficina de Desarrollo

• Apoyar a la Iglesia de América Latina ofreciendo formación en administración eclesial, para que a través de un conjunto de directrices se establezcan caminos que permitan dirigir los bienes que la Providencia Divina ha depositado en su mano, de manera que estén al servicio de los objetivos básicos de evangelizar, atender a los pobres, realizar obras de caridad y cubrir el sustento del culto y los méritos del culto.
• Crear un fondo de solidaridad para América Latina. Como cita el Documento de Aparecida: “Conscientes de que la misión evangelizadora no puede ir separada de la solidaridad con los pobres y su promoción integral, y sabiendo que hay comunidades eclesiales que carecen de los medios necesarios, es imperativo ayudarlas, a imitación de las primeras comunidades cristianas, para que de verdad se sientan amadas. Urge, pues, la creación de un fondo de solidaridad entre las Iglesias de América Latina y El Caribe que esté al servicio de las iniciativas pastorales propias (DA 545).
• Trabajar al servicio de las necesidades del CELAM, optimizando los recursos y el desarrollo interno.